Los Detectores Lineales de Humo son dispositivos de seguridad contra incendios diseñados para monitorear grandes áreas abiertas, como galpones, almacenes, aeropuertos y centros comerciales. A diferencia de los detectores puntuales tradicionales, que monitorean un único punto del ambiente, los detectores lineales funcionan a lo largo de un haz de luz que se extiende entre un transmisor y un receptor, o entre un transmisor/reflector y un único receptor, cubriendo una gran extensión de área. Esto los hace ideales para lugares amplios y con techos altos, donde la instalación de múltiples detectores puntuales sería inviable o costosa.
El principio de funcionamiento de los detectores lineales se basa en la interrupción o atenuación del haz de luz emitido por el transmisor. Cuando las partículas de humo entran en la línea de detección, reducen la intensidad del haz de luz y el dispositivo interpreta este cambio como una posible señal de incendio. Dependiendo de la configuración del sistema, el detector puede ajustar su sensibilidad para minimizar las falsas alarmas, garantizando una detección precisa y rápida, incluso en áreas con mucho movimiento o variaciones de temperatura.
Además de su alta eficiencia para cubrir grandes espacios, los Detectores Lineales son fáciles de instalar y mantener, ya que, en muchos casos, un solo dispositivo puede monitorear un área que requeriría docenas de detectores puntuales. Esto reduce los costos de instalación y mantenimiento, al tiempo que ofrece una solución robusta para la detección temprana de incendios en entornos difíciles. Estos detectores se utilizan ampliamente en industrias, centros logísticos y otros lugares donde es necesario garantizar la protección contra incendios en grandes volúmenes de superficie.

